Torre del Fang: Una joya arquitectónica gótica de Barcelona
En la provincia de Barcelona, específicamente en la ciudad de Barcelona, se encuentra un tesoro arquitectónico de valor histórico y cultural: la Torre del Fang. Esta impresionante estructura, de estilo gótico, es una muestra de la riqueza patrimonial que posee la región y representa una verdadera joya para los amantes de la arquitectura.
Un vistazo a la historia
Aunque el año exacto de construcción aún es un misterio, se estima que la Torre del Fang fue erigida en el siglo XII. Durante el siglo XVI, se la mencionaba en el Diario de la Generalitat bajo el nombre de Torre de la Virgen Maria, y su escudo en la puerta principal revela su pasado como propiedad del condado de Barcelona.
Ubicada junto al Rec Comtal, en los alrededores de la actual estación del AVE en la Sagrera, la Torre del Fang ha estado ligada históricamente a la vida agrícola de la zona de Sant Martí de Provençals. A lo largo de los años, esta masía ha resistido, a pesar del mal estado en el que se encuentra en la actualidad debido a las obras de construcción de la nueva estación.
Una vida de transformaciones
La historia de la Torre del Fang está marcada por los cambios y transformaciones que ha experimentado a lo largo de los siglos. A mediados del siglo XIX, la llegada del ferrocarril obligó a la masía a dejar su pasado agrícola y convertirse en una fábrica de materiales de construcción. A pesar de este cambio, la estructura ha mantenido su esencia y ha logrado sobrevivir a lo largo de los años.
Actualmente, la Torre del Fang se encuentra en mal estado y no es posible visitarla debido a las obras de construcción de la estación del AVE en la Sagrera. Aunque su futuro todavía es incierto, es indudable que esta histórica masía merece ser preservada y encontrar un nuevo propósito que permita su conservación y puesta en valor.
Una joya en peligro
La Torre del Fang ha sido testigo de importantes sucesos históricos, incluso durante el sitio de Barcelona en los años 1713 y 1714, cuando fue bombardeada desde su posición estratégica en el camino real que conectaba Barcelona con los pueblos de Sant Martí de Provençals y Sant Andreu de Palomar.
Hoy en día, la masía lamentablemente se encuentra rodeada y en peligro. Aunque su valor arquitectónico y cultural es innegable, su supervivencia depende de las decisiones que se tomen respecto a su futuro. Por ahora, el público no puede acceder a ella, ya que se encuentra tapiada y reservada para uso posterior a las obras en la estación del AVE en la Sagrera.
Conclusión
La Torre del Fang es un verdadero tesoro arquitectónico de estilo gótico en Barcelona. Aunque su estado actual sea decadente y no se pueda visitar, su mera presencia nos remonta a épocas pasadas y nos permite imaginar su esplendor original. Esperemos que, en un futuro próximo, esta joya histórica encuentre una nueva vida y sea valorada por las generaciones venideras como un símbolo de la riqueza cultural de Barcelona.